Anterior Salvados y gluten Siguiente
Los productos dietéticos Comyce eliminan la harina de su composición y la sustituyen por una mezcla de salvados y gluten.
Las harinas, incluso las integrales, tienen una carga glucémica excesivamente elevada como para poder consumirse durante la fase de pérdida de peso.
Hasta ahora no quedaba más remedio que eliminarlas. Pero eso supone tener que prescindir de muchos productos de consumo cotidiano a los que no nos es fácil renuciar: pan, galletas de aceite, pizzas, bizcochos...
Encontramos la solución a este problema sustituyendo la harina por una mezcla de salvados y harina con la que se pueden elaborar y consumir todos esos productos incluso durante la fase de pérdida.
La composición de esta mezcla de salvados y gluten para hacer la masa Comyce que nos permite elaborar una gran cantidad de productos aptos para la dieta se basa en estos tres ingredientes:
Combinando estos productos en diferentes proporciones hemos conseguido unas mezclas que empleamos en vez de la harina en diversos preparados tanto dulces como salados.
La diferencia básica entre salvados y gluten con la harina no es su contenido calórico, que de hecho es muy parecido. La grandísima, enorme diferencia está en la subida en el nivel de azúcar que provoca su consumo: muy baja en el gluten y los salvados. Y muy alta en la harina.
Salvado
Es un producto de la molienda del grano del cereal, concretamente de sus partes más externas.
Nosotros empleamos dos tipos de salvado: el de avena (en molienda fina) y el de trigo (en molienda gruesa).
Es una proteína presente en la mayor parte de los cereales.
Sin gluten la harina no se podría amasar. El gluten es Es el responsable de que la masa "ligue". Como el salvado no tiene gluten hemos de añadirlo para poder amasarlo y que la masa nos ligue.
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PARA LOS QUE QUIEREN SABER MÁS
Todo lo que sigue está escrito para las personas que tengan interés en saber más acerca de este tema. Pero no hace falta que se lo lea para poder hacer bien su dieta. Le vale con lo que hemos explicado antes. Lo que sigue es tan sólo para aquellas personas que quieren saber más.
Sería imposible extenderse sobre todos los aspectos de cada tema por lo que nos centraremos tan solo en los directamente relacionados con la nutrición.
EL SALVADO
En el dibujo de la izquierda se representa un grano de arroz entero al que tan solo se le ha quitado la cascarilla externa. Se aprecia con claridad la envoltura de salvado que cubre el grano. Aunque en el dibujo no se ha representado esta capa de salvado está compuesta a su vez por 5 capas que son (de fuera hacia dentro): cutícula, epicardio, endocardio, testa y aleurona.
A la derecha se representa el mismo grano de arroz desprovisto de su capa de salvado tras un proceso de "pelado" o refinado, Éste es el tipo de arroz que habitualmente consumimos.
Las propiedades nutritivas del salvado dependen mucho del cereal del que procedan y también de su grado demolienda. Vamos a fijarnos en los dos datos nutricionales que más nos interesan de cara a nuestra dieta: el IG y la cantidad de los hidratos que contienen los diferentes salvados. Como ya sabemos una vez tengamos estos dos datos podremos hallar con facilidad el valor que realmente nos interesa: la carga glucémica (CG = IG x gramos de glúcidos / 100).
Como veremos en los próximos capítulos el IG d los salvados es bajo: 15. Pero hemos de tener en cuenta que nosotros trabajamos con el salvado de avena de molienda fina, lo cual afecta a su IG, que pasa a 20. En cualquier caso, continúa siendo bajo.
En cuanto al contenido de hidratos la diferencia es muy importante: de los poco más de 20 g /100 en el salvado de trigo a los casi 70 g/100 del salvado de avena.
Teniendo en cuenta ambos factores se comprende que la carga glucémica del salvado de avena fino sea mucho más elevada que la del salvado de trigo grueso.
Aunque para nosotros no tiene tanta importancia conviene reseñar que el salvado de avena es bastante más calórico que el de trigo: 396 kcal/100 frente a 273 kcal/100 respectivamente.
